Nunca me ha gustado hablar en términos de merecimiento. La meritocracia me parece profundamente dañina... Pero si hoy hablo de "merecer" no es en términos competitivos ni con vicios morales. Es un proceso de terapia, de darme palmaditas en la autoestima, es un "hombre, ya pasaste por cosas complejas, aprendiste y enseñaste, pero... Ahora es tiempo de partir y esperar porvenires menos agitados, menos turbulentos". Lo turbulento nunca será sinónimo de malo, muchos tesoros subyacen bajo el mar picado. Pero ya quiero buscar aguas tranquilas. Merezco un amor bonito, que me quiera, que se preocupe por mí, que me permita caminar de su mano, que se alegre de mis éxitos y que yo me pueda alegrar de los de ella --para mí, por ahora, "ella", para otros "él" o "elle-- Merezco un amor bonito, que trate con tacto los dolores y heridas, no para cargarlas por mí, ni para curarlas... solo, para procurar no hacerlas más grandes. Merezco un amor bonito, que am...
Digo puras mentiras y las paso por verdades... O digo puras verdades y las paso por mentiras... Depende, como todo en esta vida, del ojo que lo mire.